Chrissy Teigen y John Legend se están tomando muy en serio la pandemia mundial. No solo están siguiendo todas las normas de distanciamiento social, enmascaramiento y vacunación, sino que también están tomando medidas de seguridad en sus propias manos. En un esfuerzo por seguir disfrutando de su vida social mientras minimizan los riesgos para la salud, optaron por gastar una gran cantidad de dinero para evitar interactuar con el público por completo.
Teigen y Legend abrigaron a sus hijos y con entusiasmo hicieron un viaje para asistir a Christmas Spectacular de Radio City, pero estaban obsesionados con evitar cualquier interacción con otras personas. Apenas se inmutaron cuando compraron toda la fila de asientos detrás de ellos, para asegurarse de que nadie respirara en su dirección general.
Comprar una fila completa de asientos
Chrissy Teigen y John Legend claramente quieren ir a lo seguro cuando se trata de COVID-19. Optaron selectivamente por asistir a Radio City Hall, que no por casualidad exige la vacunación completa de todos sus invitados antes de la entrada. Practicando mucha cautela, esta atractiva pareja de celebridades invirtió una gran cantidad de dinero para comprar todos los asientos en la fila detrás de ellos. Con un patrimonio neto combinado de $75 millones, esta familia apenas se inmutó mientras engullían con avidez todos los asientos en la fila de una de las atracciones navideñas más populares de Nueva York. Los asientos de la orquesta no estaban obstruidos, y con una fila despejada detrás de ellos, prácticamente se sentía como un espectáculo privado para esta familia.
Little Luna y Miles fueron conducidos sin tener que encontrarse con ningún miembro del público, y la única persona a corta distancia de cualquiera de ellos era un destacamento de seguridad singular con el que interactúan regularmente. El dinero no era un problema cuando se trataba de seguridad personal.
Mantenerse alejado del público
Chrissy Teigen y John Legend demostraron claramente que no quieren tener nada que ver con el público en medio de la pandemia en curso. No solo gastaron una gran cantidad de dinero en efectivo para su espacio personal, sino que también se aseguraron de que su entrada y salida estuvieran cuidadosamente coordinadas. Parecían tan obsesionados con asegurarse de que nadie se acercara a ellos, que John Legend, que notoriamente atrae a multitudes de fanáticos, abandonó el programa 10 minutos antes de que terminara, permitiendo que su esposa e hijos tuvieran una salida más tranquila, sin los paparazzi pisándoles los talones.
Manteniéndose dentro de su tema de ejecutar todas las medidas de seguridad posibles, la familia mantuvo sus máscaras puestas durante su estadía, a pesar de que el lugar no lo requería.
Muchas personas tuvieron dificultades para encontrar asientos disponibles para esta costosa presentación… ahora saben por qué.